ondacero.es
aragon | 18.04.2018 17:35
En su opinión, si solo se terminaron 21 de las 131 depuradoras previstas, fue porque la crisis impidió a las constructoras obtener financiación para continuar las obras. En una respuesta a la diputada del PAR, María Herrero, Cajal ha culpado de ese bloqueo económico a la Red de Agua Pública, la RAPA. Asegura que el Banco Europeo de Inversiones estaba dispuesto a prestar el dinero, pero este colectivo les envío una carta donde advertían de los riesgos del sistema concesional.
El presidente de la Confederación del Ebro entre 2004 y 2008, José Luis Alonso, tiene una visión distinta a la de Alfredo Cajal. Asegura que el Gobierno aragonés tenía dinero suficiente, procedente del Estado, para construir directamente las depuradoras. Además, subraya que tanto el Ministerio de Medio Ambiente como la CHE habrían preferido la inversión directa en estas infraestructuras, y que el Gobierno aragonés fue el único de la cuenca que optó por las concesiones.